Labubu, el juguete coleccionable increíblemente popular de la empresa china Pop Mart, ha explotado en popularidad recientemente. Con su empaquetado de "caja sorpresa" que fomenta múltiples compras para completar una colección, las ventas de estos juguetes de plástico de aspecto espeluznante se han disparado, lo que ha llevado a que los ingresos se dupliquen en el último año y las acciones de Pop Mart aumenten un 1200%.
Pero, ¿existe un lado oscuro detrás de estos coleccionables monos/terroríficos? Pop Mart ha recibido críticas que afirman que Labubu está animando a los niños a iniciarse en el juego, y es fácil ver por qué.
La "caja sorpresa" OBLIGA a hacer compras innecesarias
La forma en que se venden los Labubus utiliza el empaquetado de "caja sorpresa". Esto significa que cada caja de Labubu, que cuesta entre 20 y 30 dólares en el mejor de los casos, no te garantiza conseguir el horrible monstruito que estás buscando.
¿Y qué significa esto? Que tienes que comprar otra caja sorpresa. Y otra. Y otra. Y otra más.
Si quieres los Labubus más raros, te vas a gastar una pasta increíble, ya que hay una probabilidad de 1/72 de conseguirlos en cualquier set.
El hecho de que los Labubus se vendan en sets también se aprovecha del instinto natural de las personas de querer completar cada colección.
La gente ha gastado cientos de euros solo intentando conseguir ese Labubu raro, y el mercado de reventa está completamente LOCO. Los Labubus raros pueden venderse entre 5.000 y 15.000 dólares, y todo se debe a la mentalidad de escasez que crea la caja sorpresa. Es todo un negocio secundario lucrativo, si puedes hacerte con suficientes Labubus raros.
El empaquetado de caja sorpresa es similar a las cajas de botín en videojuegos como RuneScape, una táctica que ha sido descrita como fomentadora del juego en niños. Esto se debe a que el comportamiento similar al juego que permiten las cajas de botín (y las cajas sorpresa) es una gran parte de la experiencia de compra.
Al final del día, no es juego de azar en el sentido más estricto, pero la forma en que se empaqueta Labubu proporciona una puerta de entrada al mundo de las apuestas.
Labubu está introduciendo a los niños en mecánicas de juego
Se ha afirmado que Labubu está dirigido a coleccionistas de la Generación Z. Sin embargo, con su estética esponjosa y caricaturesca, es evidente que Labubu tiene un atractivo natural para los niños, como se muestra a continuación. Es como cuando los niños en España se volvieron locos con los Gormitis o los Pokémon, pero con un sistema que les empuja a gastar mucho más dinero. (Usuario pickedflowerss | © Vía Tiktok)